Dos Son Mejor Que Uno
By America Kimlinger
Mi esposo y yo recientemente celebramos nuestro vigésimo aniversario de bodas. Nuestro viaje ha tenido altibajos. Somos padres de dos hijos. Nos hemos mudado muchas veces, incluidas dos mudanzas entre países. Hemos navegado cambios en nuestras carreras y experimentado una mezcla de pérdidas y celebraciones. Nuestro amor y compromiso se han fortalecido, permaneciendo juntos a través de todo. Este aniversario ha resaltado la invaluable naturaleza de las asociaciones para nosotros.
El concepto de asociación está profundamente arraigado en las Escrituras, ilustrado por ejemplos como Jesús enviando a los discípulos en grupos de dos y la asociación entre Pablo y Timoteo en la difusión del Evangelio. Estas y muchas otras instancias en la Biblia enfatizan la importancia de las asociaciones para cumplir con los propósitos de Dios. Nos recuerdan que no estamos destinados a recorrer la vida solos, sino que estamos llamados a colaborar con otros, cada uno con roles distintos y un objetivo compartido.
La esencia de la asociación radica en su naturaleza colaborativa, donde nos unimos, nos apoyamos, creemos el uno en el otro y nos respaldamos incondicionalmente. Eclesiastés 4:9-10 captura maravillosamente esta esencia, destacando cómo las asociaciones pueden amplificar nuestro impacto y enfatiza el beneficio mutuo y el apoyo que se encuentran en las asociaciones:
“Mejor son dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante!”
Las asociaciones pueden verse en varias dimensiones. Primeramente, está la asociación con Dios.
“Fiel es Dios, quien los ha llamado a tener comunión con su Hijo Jesucristo, nuestro Señor.” - 1 Corintios 1:9
En esta asociación, reconocemos la fidelidad de Dios y nuestro llamado a trabajar junto a Él para avanzar Su reino. Involucra rendir nuestra voluntad y deseos a los Suyos, permitiéndole guiar y dirigir nuestros caminos. Al someternos a Dios, nos abrimos al trabajo transformador del Espíritu Santo, quien se convierte en nuestro principal socio en el ministerio y la vida.
Asociarse con Dios implica alinear nuestros corazones y mentes con Sus propósitos, confiando en que Él nos capacitará para cumplir Su plan para nosotros. Como creyentes, estamos llamados a entrar en esta asociación con un compromiso inquebrantable, devoción y dedicación total.
A continuación, está la dimensión de la asociación con otros. Tanto en el ministerio como en la vida diaria, asociarse con otros es esencial. Los desafíos de la vida a menudo son demasiado abrumadores para enfrentarlos solos; necesitamos el apoyo y la asistencia de quienes nos rodean, quienes pueden levantarnos cuando tropezamos y caminar a nuestro lado en nuestro viaje.
Este tipo de asociación no se trata solo de tener personas a nuestro alrededor; se trata de elegir a las personas adecuadas. Andy Stanley a menudo enfatiza que las personas a nuestro alrededor "determinarán la dirección y la calidad de nuestra vida."
Por lo tanto, tiene que elegir a las personas adecuadas a su alrededor, personas en las que pueda confiar. La confianza es la base de una buena asociación, ya sea con su cónyuge, jefe o socio ministerial. La confianza se cultiva con el tiempo a través de acciones consistentes, confiabilidad y alineación de valores y objetivos. Cuando los socios pueden depender el uno del otro, sabiendo que las promesas se mantendrán y honrarán, la asociación se fortalece.
En StartCHURCH, valoramos profundamente el principio de la asociación y su importancia tanto en nuestro trabajo como en nuestras vidas personales. Reconocemos que Dios nos llama a asociarnos con Él y con los demás.
Tenemos el honor de ser el socio de confianza para más de 20,000 iglesias y ministerios, un testimonio del valor que ven en nuestro enfoque de asociación y nuestro compromiso de apoyar su misión. Asociarse con StartCHURCH significa convertirse en parte de una comunidad dedicada que está completamente comprometida en apoyarle durante la vida de su ministerio. Estamos aquí para caminar a su lado. Llámenos al 678-830-2600 para explorar cómo podemos asociarnos juntos para el Reino.
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