7 Reglas Importantes de Impuestos para los Recibos de Donaciones de Fin de Año
By Kristen Alexander
Con casi todo digitalizado en el siglo XXI, es lógico pensar que recibir donaciones como organización sin fines de lucro debería ser simple. ¡Y en su mayor parte, lo es! Pero incluso en las tareas más simples, hay cosas que recordar al aceptar contribuciones y cumplir con su responsabilidad como buen mayordomo de su organización.
Lo último que desea hacer después del Año Nuevo es preocuparse por reunir documentos para sus miembros que muestren lo que donaron para que puedan presentar sus impuestos a tiempo. Entonces, ¿qué puede hacer para que esto sea más fácil? ¡Aquí hay 7 reglas importantes a seguir!
La Responsabilidad de la Iglesia hacia Sus Donantes
Hay varios aspectos que las iglesias deben tener en cuenta al administrar las donaciones. Por ejemplo, proporcionar declaraciones de donación a los donantes y tener una política de recuento adecuada son clave para la responsabilidad y la precisión en la administración de los fondos de la iglesia.
La verdad del asunto es que cuando un donante solicita una deducción de impuestos por contribuciones caritativas otorgadas a una organización sin fines de lucro, la carga de la prueba recae sobre él. La Ley de Protección de Pensiones (PPA) de 2006 aumentó los requisitos para que los donantes justifiquen sus donaciones al solicitar una deducción caritativa en las declaraciones de impuestos sobre la renta.
Por lo tanto, para que los miembros de su iglesia reciban una deducción de impuestos por una donación, deben demostrar una de dos cosas: registros bancarios o una declaración escrita de la organización a la que dieron, llamada donación o recibo de donación.
Hay varias "reglas" que su iglesia debe tener en cuenta antes de distribuir los recibos de donación. Echemos un vistazo a las reglas a continuación.
Regla #1: distribuya las declaraciones de contribución el 31 de enero o antes
Para fines de enero, la mayoría de los contribuyentes han recibido su W-2, 1098, 1099-NEC u otros documentos relacionados con los impuestos. Para que un contribuyente pueda deducir una donación de la iglesia, debe recibir una declaración de contribución antes de presentar una declaración de impuestos.
Por lo general, es una buena idea hacer un anuncio de que sus declaraciones de contribución se enviarán a los miembros de la iglesia antes del 31 de enero. Idealmente, los miembros deben esperar para presentar sus declaraciones de impuestos hasta que hayan recibido sus declaraciones de donación.
Regla #2: la regla de la tarjeta de crédito
Muchas iglesias ahora aceptan donaciones con tarjetas de crédito. La Publicación 526 del IRS establece que las contribuciones cargadas a una tarjeta de crédito bancaria son deducibles en el año en que se realiza el cargo.
Esto significa que si una persona hace una donación con tarjeta de crédito el 30 de diciembre, pero la iglesia no carga la tarjeta hasta el 1 de enero, el donante no puede deducirlo hasta el próximo año. Si esto le sucede a usted, ajuste sus registros para asegurarse de que la declaración de contribución sea correcta.
Regla #3: la regla del quid pro quo
Esta regla requiere que su ministerio lleve un registro de las donaciones a su iglesia cuando el donante recibe algo a cambio. Un ejemplo puede ser la grabación de un sermón dominical. Una iglesia vende un CD del sermón por $10.00 y el donante le da a la iglesia $50.00. La regla quid pro quo permite al donante obtener una donación deducible de impuestos de $40.00 porque el donante recibió algo a cambio de la donación.
Regla #4: la regla de los $75.00
La regulación fiscal requiere que un donante que dé una contribución quid pro quo que exceda los $75.00 reciba un recibo escrito por separado que indique cuánto se donó. El recibo debe incluir una estimación de buena fe del valor de los bienes o servicios que el donante recibió a cambio.
Regla #5: la regla de los $250.00
Como las reglas # 3 y # 4 anteriores, esta regla requiere que cualquier donación de $250.00 o más sea tratada de manera diferente si el donante recibió algo a cambio. Para que el donante pueda obtener una deducción de impuestos, debe obtener un recibo escrito por separado que indique cuánto se le dio y que "aparte de los enumerados, no se proporcionaron bienes o servicios, excepto los servicios religiosos intangibles".
Sin embargo, suponga que el donante no recibe nada a cambio. En ese caso, puede desglosarlo en el estado de cuenta anual con cualquier otra donación siempre que incluya que "no se proporcionaron bienes o servicios, excepto los servicios religiosos intangibles”.
Regla #6: la regla de no efectivo
Esta regla prohíbe a las iglesias proporcionar recibos por donaciones que no sean en efectivo. Por ejemplo, supongamos que un miembro dona una computadora usada. En ese caso, la iglesia tiene prohibido por la sección 170(f)(8)(B)(i) estimar el valor de la donación y emitir un recibo por esa cantidad. Por lo tanto, si la computadora vale $600.00, la iglesia no puede darle al donante un recibo por $600.00. En cambio, la iglesia debería emitir un reconocimiento escrito contemporáneo.
Regla #7: la regla de los $500.00
Esta regla se aplica a donantes e iglesias cuando una persona hace una donación no monetaria valorada en más de $500.00. Las iglesias a menudo reciben donaciones como computadoras, escritorios, pianos, órganos, tambores y equipo de oficina. Para que el donante declare dicha donación, debe presentar el Formulario 8283 con su declaración de impuestos. El propósito de este formulario es doble:
1. el donante puede reclamar el valor del artículo entregado
2. la iglesia puede firmar el formulario para reconocer que recibió el regalo.
¡No Tiene que Hacer Todo Esto Solo!
Es esencial que su iglesia tenga un método adecuado para realizar un seguimiento de las donaciones y crear recibos de donación adecuados para sus donantes. Si aún no tiene un sistema confiable y seguro, ¡podemos ayudarle!
Llámenos hoy al 877-494-4655 para obtener más información sobre nuestro sistema de administración de donaciones Kingdom Steward y cómo nuestro equipo de contables puede ayudarle a administrar las generosas contribuciones de su organización, ¡para que no se pregunte si lo está haciendo bien!
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